Desde que la Asamblea General de la O.N.U. (Organización de Naciones Unidas) así lo aprobase en 2015, se celebra el Día Internacional del YOGA. Sus beneficios han quedado demostrados, tanto para el cuerpo como para la salud mental, especialmente en tiempos de pandemia o momentos difíciles.
Félix Loreno, Trabajador Social Clínico y Terapeuta desde hace más de 35 años, define la salud mental como «la capacidad del ser humano de poder responder a las necesidades de la vida diaria de la manera más armónica y estable posible, desde una perspectiva de comprender la realidad inmediata, ser flexible ante las situaciones y tener capacidad de responder a ellas con la mayor madurez posible». Y es que gracias al Yoga, se trabaja resistencia, flexibilidad, equilibrio y la fuerza. En todas estas áreas, la concentración y la calma mental son fundamentales. (Fuente: Noticias O.N.U.: https://news.un.org/es/story/2020/06/1476232).
Nuestra calma -o agitación- mental se ve reflejada en nuestras «asanas» (posturas de Yoga), sobre todo en el equilibrio. También el control de la respiración resulta fundamental para canalizar nuestras emociones y mantener un estado general más armónico, con mejor capacidad de responder de forma resiliente y efectiva a los estímulos del entorno, manteniendo nuestra salud biopsicosocial.
Como parte de la formación de nuestros/as MENTORES/AS EMOCIONALES, el pasado viernes 05/03/2021 la profesora de Yoga Ana Belén Villalba Tejero (Con Alma de Yoga). Parte de este conocimiento será plasmado en las SESIONES DE INTELIGENCIA EMOCIONAL que este alumnado ha preparado para el resto de sus compañeros/as del I.E.S. Aguilar y Eslava y que se llevarán a cabo la próxima semana.
El cuidado del cuerpo y la mente nos ayuda a mantenernos flexibles y con mayor capacidad de resistencia (RESILIENCIA) para afrontar los retos de la vida (pandemia, situaciones personales difíciles, etc.). Recordemos que la RESILIENCIA puede definirse como la capacidad que tienen el ser humano de hacer frente y superar situaciones muy traumáticas o difíciles, así como las condiciones adversas.
La Neurociencia considera que las personas más resilientes tienen mayor equilibrio emocional frente a las situaciones que nos generan estrés, soportando mejor la presión (sin ser arrasado/a) por ella. Esto permite una sensación de control frente a los retos de la vida y mayor capacidad de afrontar situaciones difíciles y estresantes (Fuente: https://www.areahumana.es/resiliencia/).
El Yoga, por tanto, además de cuidar nuestro CUERPO, cuida de nuestro estado de salud general, especialmente desde el punto de vista psicoemocional.
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