
En un centro educativo asegurar la ventilación necesaria en invierno se convierte, en tiempos de pandemia, en un verdadero desafío, si sólo se cuenta con la ventilación natural de abrir puertas y ventanas.
La ventilación natural depende significativamente de la diferencia de temperatura entre el aire interior y exterior, la presencia de lluvia, viento, y tendrá como resultado, muchas incomodidades, enfriamiento de las aulas y que no se pueda garantizar una ventilación natural suficiente en todo momento y lugar.
El I.E.S. Aguilar y Eslava va a poner en marcha un SISTEMA DE VENTILACIÓN FORZADA, que tiene en cuenta los siguientes aspectos:
- La renovación de aire es el parámetro más importante, con un mínimo de 12,5 litros por segundo (l/s) y ocupante, que es el valor que se atribuye a un aire de buena calidad.
- Se han verificado todos los equipos encargados de la renovación de aire por una empresa especializada que se encargará de su mantenimiento siguiendo las directrices del Ministerio de Sanidad.
- Se da prioridad al caudal del sistema y se controlan los niveles de CO2.
- El sistema cuenta con recuperadores de calor de placas, que asegura que la ventilación no sea con aire frío o demasiado húmedo.
- Se favorecerá la ventilación cruzada, realizando una ventilación regular con la apertura de puertas y ventanas.
Las autoridades sanitarias recuerdan que no se pueden usar equipos basados en la generación de ozono o ionizadores en locales con presencia de personas y que la Organización Mundial de la Salud advierte contra la utilización de las lámparas UV-C para desinfectar, no se recomienda en ambientes en los que haya presencia de personas, por lo que sistemas de ventilación forzada como el que dispone el I.E.S. Aguilar y Eslava se convierten en la medida más eficaz para luchar contra la epidemia en las aulas.