Visita a la exposición «Maíz Castro, Escultor»

El alumnado de 4º ESO (itinerario Artes) y 1º Bachillerato de Artes han asistido el martes 25 de abril a la exposición del escultor egabrense Antonio Maiz Castro, en la Sala de Exposiciones de la Casa de la Cultura de Cabra. Allí han podido disfrutar de una visita guiada por miembros del colectivo «Cabra en el Recuerdo» y conocer la biografía y obra del artista.

El escultor Antonio Maiz Castro nació en Cabra en 1906 y con tan sólo 13 años y gracias a las gestiones del catedrático del Instituto, Juan Carandell y Pericay, recibió una beca para iniciar estudios de arte en Madrid. Aunque al poco tiempo escapa de la residencia para volver a Córdoba, estableciéndose en la capital, en cuyas calles realiza sus primeros trabajos. Esto le hace ganarse el apodo de «escultor callejero», que cambiaría por el de «genio chico» (debido a su corta estatura) que le pone Julio Romero de Torres cuando Antonio Maíz entra en su taller.

Tras asistir durante unos meses a la Escuela de Artes y Oficios de Córdoba vuelve a Madrid, esta vez para estudiar junto al escultor Juan Cristóbal, con el que comparte ocho años de intensa actividad, tanto formativa como artística.

En 1936, al estallar la Guerra Civil, se traslada a Loja (Granada), donde trabaja ocasionalmente esculpiendo lápidas o de jornalero en el campo, sacrificando su talento artístico para mantener a su familia. Posteriormente se establece como docente, fundando en los años 50 una Escuela de Arte en Loja en la que enseña su arte.

En agosto de 1989 es nombrado Hijo Adoptivo de Loja, ciudad en la que falleció el 25 de marzo de 1990.

Antonio Maiz Castro (1906-1990) es autor del busto original en mármol de D. Luis Aguilar y Eslava que preside su plaza diseñada por el afamado arquitecto Luis Berges en 1933 y del que el mismo realizó la actual réplica del año 1981. Además, para esta exposición el Instituto y la Fundación Aguilar y Eslava han colaborado con la cesión de documentos y el modelo de retrato en escayola de Guilermo Pérez-Aranda, que se exhibe junto a la escultura final tallada en madera.